Relatos de curación
Es con humilde gratitud hacia Dios, por Sus maravillosas bendiciones, que envío este testimonio. Durante largo tiempo padecí de várices y unos meses antes de que tuve conocimiento de la Christian Science, unas úlceras aparecieron en mi pierna.
Nuestra hijita, quien nació con las caderas dislocadas, tuvo que llevar vendaje de yeso durante tres años. Después tuvo que usar una fornitura de cuero, desde la cintura hasta los tobillos, la cual no podía quitarse aún cuando estaba dormida.
Es con profunda gratitud a Dios y a la señora Eddy que deseo expresar mi agradecimiento por lo que la Christian Science ha hecho en mi favor. Estuve enferma por un año y diez meses.